
Empaquetadora Automática para Perfiles C y U: Producción sin límites
En toda línea perfiladora, hay un punto donde la velocidad parece tocar techo. No importa cuán rápida sea la máquina: tarde o temprano aparece el mismo problema… el empaquetado manual.
Quien trabaja en producción lo sabe bien: cuando el ritmo depende del operador, el cansancio o la falta de sincronía con la línea terminan generando pequeñas pausas que, al final del día, se notan en la productividad.
El desafío del empaquetado
El empaquetado manual siempre fue uno de los mayores cuellos de botella. Armar, alinear y amarrar fardos no solo exige esfuerzo físico, sino también coordinación constante con la velocidad de la línea.
Y por más experiencia que tenga el operador, es muy difícil mantener el mismo ritmo durante toda la jornada.
Una solución automática y continua
Para resolver este punto, desarrollamos una empaquetadora automática para perfiles C y U, recientemente comisionada en Brasil.
El equipo trabaja integrado directamente a la línea, operando a 50 metros por minuto, sin necesidad de frenar la producción.
El resultado es una operación continua, sin interrupciones y con un flujo constante desde el perfilado hasta el empaquetado final.
Inteligencia aplicada al proceso
La clave está en su software inteligente, que define automáticamente el posicionamiento y el diseño ideal de cada fardo.
Así, cada paquete sale con cuatro lados compactos, esquinas firmes y una estabilidad perfecta para el transporte.
Todo el proceso se ajusta solo, sin intervención manual y sin margen para errores.
Resultados que hablan por sí solos
El primer cliente que incorporó esta tecnología adquirió tres unidades. Los resultados fueron tan positivos que ya hay nuevas instalaciones programadas.
Más que una mejora puntual, esta solución representa un paso hacia una automatización real del final de línea, donde antes siempre había un operador tratando de mantener el ritmo.
Beneficios concretos
Fardos estables y seguros para el transporte.
Empaque y pesaje completamente automáticos.
Línea operando siempre a su máxima velocidad.
Menor esfuerzo físico y reducción de riesgos laborales.
Más eficiencia, menos límites
La automatización del empaquetado permite aprovechar al máximo todo el potencial de la línea.
Menos pausas, menos errores y una calidad constante en cada lote: ese es el camino hacia una producción sin límites.